Según sus propias palabras, Roch llegó a Chamonix, donde vive actualmente, para jugar hockey sobre hielo. Sin embargo, rodeado de montañas, pronto se convirtió en un escalador. Empezó por aprender a usar una cuerda, piolet y crampones. Para empezar con salto BASE faltaba solo un pasito.
Por primera vez saltó cuando tenía 21. SU padre era un paracaidista y uno de los pioneros de salto BASE en Francia. Era obvio Roch seguirá los pasos del padre. Y le gustó este deporte desde el primer momento. Uno de los saltos más difíciles y peligrosos de su carrera ocurrió en Valgrisenche, Italia. El sitio era en bastante gran altura, sobre los 3800 metros y le ofreció tan solo unos 200 metros de desnivel. „En los días laborales, si tenía tiempo, madrugaba tempranito y a las 6.30 salía hacia Magland (un municipio en la región de Rhône-Alpes, en el sureste de Francia), caminaba una hora para dar un saltito vertical de 800 metros. Después volvía al trabajo con una gran sonrisa en mi cara,” dice Roch. Uno de sus saltos recientes realizó desde la Aiguille Noire, zona del Mont Blanc.
Si eres un escalador, probablemente sueñas con escalar este pico en la arista de Peuterey. Si eres un basejumper (piloto de wingsuit), probablemente has soñado con apertura de nueva salida desde esta cima. Roch y sus compañeros han hecho ambas cosas.
Aiguille Noire de Peuterey (3773 m) es una montaña que forma parte de la cresta de Peuterey junto con la cima de Aiguille Blanche de Peuterey. Esta cresta sale del macizo de Mont Blanc hacia Italia. La montaña fue escalada por primera vez por Karl Brendelet y Hermann Schaller, el día 26 y 27 de agosto de 1930. Hasta ahora es una de las grandes rutas clásicas en el macizo.
El grupo caminaba cuatro horas hasta llegar al primer refugio donde pasaron la noche. Madrugaron a las 4 de la mañana. Escalaban 10 horas por terreno suelto y descompuesto hasta encontrar un buen punto de salida para el salto BASE. Nadie había probado un salto BASE desde esta parte de la montaña, por lo tanto no estaban seguros de que era posible o no. Pero saltaron, volaron unos 150 metros fuera de la pared y por encima de un glaciar aterrizaron en una pradera al lado de sus coches y se fueron a sus casas con una sonrisa grande en sus caras…
