Ultramaratón Ocean Floor Race – 260 km por el desierto
Schiester que acabó en segunda posición dice: Esto no es como la Badwater (una carrera a través de Death Valley). Es más larga y no vas por carreteras. No tienes una ruta marcada y no estás únicamente corriendo. También necesitas utilizar el GPS para saber en qué dirección correr”. Los corredores deben llevar un dispositivo GPS para saber a dónde ir. Para hacerlo más duro los corredores no reciben los waypoints del GPS hasta solamente dos días antes de la carrera, dejándoles muy poco tiempo para planificar su ruta.
Los participantes siguen los waypoints, donde pueden guardar su comida. Schiester incluyó su dieta preferida: una mezcla de dátiles, nueces y maíz en aceite de oliva, más salchichas austríacas y pasteles de casa. Una dieta beduina.
Al final ganó Steve Sleuyter. La leyenda belga de las ultramaratones quedó primera con 45 minutos de ventaja. “Participaron 17 corredores en esta carrera,” nos cuenta Schiester. “Todos y cada uno de ellos acabaron con una ampolla, pero yo tenía la peor ampolla de todos. ¡Incluso los organizadores me dieron el premio a la peor ampolla que jamás habían visto!”
Gracias al límite „generoso“ de 96 horas, en la carrera pueden participar profesionales de ultratrail tal como amateurs. Sin embargo no se trata de una carrera de masas. A pesar de lo brutal del terreno, con temperaturas de hasta 57.4 ºC, Schiester cree que el Sáhara es “uno de los lugares más bellos del mundo.”
Más informaciones: www.oceanfloorrace.com
Fuente: páginas y FB de oceanfloorrace.com. Redbull.com. Vídeo: youtube.com